Tu corazón desgarrado,
miedo a soltar amarras.
¿Por qué te aferras
tanto a los muertos y desprecias la vida?
¿Qué tiene el pasado
que te impide avanzar?
¿Cuál es su poder?
Difícil aceptar la
realidad
cuando los fantasmas no
te abandonan.
No, el pasado no vuelve,
déjale descansar en paz.
No vives, no dejas
vivir,
No ates, no te ates,
No encadenes, no te
encadenes.
No es tarde, nunca es
tarde para empezar a sentir.
Deja que los muertos reposen
en paz y comienza a vivir.
¿Qué ves mirando atrás
que te impida sonreír?
No, no mires atrás,
es sólo un fantasma,
con él sólo te espera…
soledad.
Abre tu alma
destrozada,
deja que la vida se
instale en ella,
ámate como nunca te has
amado.
Dilo en alto:
¡Estoy viva! ¡Estoy
vivo!
Ángel Hache