Con pequeños gestos solidarios somos capaces de crear un mundo en el que podemos sentirnos satisfechos de vivir.
Somos personas con nombre, rostro, sensibilidad. No somos un número en una estadística. Capaces de realizar lo que nos proponemos. La inmensa mayoría dispuestos a ofrecernos sin esperar nada a cambio.
Unos pocos aún no han comprendido que formamos entre tod@s el alma de este mundo, están muy ocupados en acaparar bienes por temor a pasar penuria. La cuestión es que muchos de estos ocupan puestos de poder y decisión sobre todos los habitantes de esta Tierra. Esta situación tiene que cambiar y el cambio empieza en el interior de cada uno, viendo nuestras carencias y posibilidades. Es un trabajo de constancia, del día a día, tenemos la voluntad y la capacidad de transformarnos. Es cuestión de dar un pequeño paso en la dirección acertada, aquella que nos une a toda la humanidad. Podemos empezar con una sonrisa... lo demás vendrá por la inercia de nuestra voluntad de acción positiva.
Unos pocos aún no han comprendido que formamos entre tod@s el alma de este mundo, están muy ocupados en acaparar bienes por temor a pasar penuria. La cuestión es que muchos de estos ocupan puestos de poder y decisión sobre todos los habitantes de esta Tierra. Esta situación tiene que cambiar y el cambio empieza en el interior de cada uno, viendo nuestras carencias y posibilidades. Es un trabajo de constancia, del día a día, tenemos la voluntad y la capacidad de transformarnos. Es cuestión de dar un pequeño paso en la dirección acertada, aquella que nos une a toda la humanidad. Podemos empezar con una sonrisa... lo demás vendrá por la inercia de nuestra voluntad de acción positiva.
Ángel Hache
Este vídeo muestra sin palabras la dirección a tomar.
